martes, 11 de septiembre de 2012

Pintura


"Bodegón y ventana III" .Temple s/ lienzo.60x75cms.

En los últimos cursos de la facultad había una asignatura bien interesante: “procedimientos pictóricos”. Se estructuraba en clases y exámenes teóricos, con mogollón de apuntes, y con ejercicios prácticos que realizábamos hacinados en un solo aula. Entre los alumnos se la conocía como “cocina”. Se repasaban todas las técnicas pictóricas de la historia , usando los tratamientos y soportes de cada época.

A primera vista parecía de lo más atractiva, pero pronto de dabas cuenta de que el titular que la impartía y el aula donde lo hacía también parecían datar de épocas remotas : el tipo era de lo más estreñido y seco, y el aula apestaba a cola de conejo, trementina, huevos podridos y otros olores indeterminados , como la pedantería del profesor o la tirria que destilaban los alumnos-as hacia este personaje del que no citaré el nombre .

En una ocasión, viendo una obra suya en una expo se podía leer al lado la retahila de palabros que describían su abigarrada técnica, pienso que conseguía venderlos más por esta razón que por sus temas : palomitas cursis revoloteando o comiendo alpiste.

Si te acercas a un cuadro de Tápies y lees la  técnica utilizada  junto al título, lo más corriente es que leas “Óleo y técnica mixta sobre madera o tela”.
 Pero si te acercas a uno de éste pájaro puedes encontrarte con “Temple a la proteína de leche sobre soporte a  bastidor de samba tensado con grapa industrial en aglomerado marino reforzado y aparejado con zinc y yeso mate, imprimado sobre papel Fabriano encolado y texturado con acetato de polivinilo, polvo de mármol y  piedra pómez”.Y dos huevos duros!, cabría añadir .

Lo interesante fue comprobar cómo los grandes maestros de la pintura trabajaban sobre yeso y con veladuras de óleo superpuestas, logrando las luces que conseguían los Van Eyck , Masaccio o Caravaggio, por ejemplo.Un trabajo prolijo y sistemático, sin opciones al más mínimo error.

Voy a colgar algunos de los ejercicios con los que nos torturaba, (al menos nos dejaba escoger los temas y el estilo, pero, ojo, la apuesta gráfica también tenía que ser de su agrado).Este es un temple al huevo sobre tela texturada en yeso, una técnica que se usaba en el SXII en los altares románicos, y parecida a la que empleó Miguel Ángel en el fresco de la capilla Sixtina. (Ay señor)


2 comentarios:

  1. Vaya artículo que te has clavao... debía ser un horror el susodicho personaje. En cuanto a las técnicas... pues es digno de estudio, porque lo del huevo me ha dejado planchado como tal.

    Un abrazo.

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  2. Tenías que separar previamente , a mano, la clara y la galladura (Que no valen para pintar) de la yema en la cáscara...Arguiñano total, a la basca se le caía y se formaba un barrizal que a los cuatro días apestaba que pa qué.Un número.

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